jueves, 14 de diciembre de 2023

NO SABEIS DE QUE ESPIRITU SOIS

 

NO SABEIS DE QUE ESPIRITU SOIS



Lucas 9:51-56

Jesús reprende a Jacobo y a Juan

51 Cuando se cumplió el tiempo en que él había de ser recibido (analémpteōs) arriba, afirmó su rostro para ir a Jerusalén. 52 Y envió mensajeros delante de él, los cuales fueron y entraron en una aldea de los samaritanos para hacerle preparativos. 53 Mas no le recibieron (anapémasate), porque su aspecto era como de ir a Jerusalén. 54 Viendo esto sus discípulos Jacobo y Juan, dijeron: Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma? 55 Entonces volviéndose él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois56 porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas. Y se fueron a otra aldea.

(analémpteōs) significa “tomar hacia arriba, elevar, ascender”.  

(anapémasate)

Hebreos 13:2 No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.

 

El amor se muestra en recibir con agrado a quienes no son como nosotros.

 

Romanos 15:7 Por tanto, recibíos (proslambáno) los unos a los otros, como también Cristo nos recibió (proslambáno), para gloria de Dios.

 

Gálatas 4:14 y no me despreciasteis ni desechasteis por la prueba que tenía en mi cuerpo, antes bien me recibisteis (proslambáno) como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús.

 

(proslambáno) significa “recibir, acoger, recibir con agrado”

 

1-Tenemos que reconocer que esto de recibir a otros acogerlos y que ellos nos acojan es lo más difícil del evangelio, hablamos de amor, de acciones puntuales, pero recibir es hospedara alguien en tu vida, familia e Iglesia.

 

Recibir a otros es una forma de expresar el amor cristiano, pero también implica un desafío y una responsabilidad. Algunos obstáculos que nos pueden impedir recibir a otros son:

1-La pobreza en el lenguaje verbal: Hay personas que hablan con monosílabos, con unas pocas palabras que usan como “comodín” para responder a cualquier pregunta1. Esto dificulta la comunicación y la comprensión de los demás, incluso de nosotros mismos.

2-El miedo a exponerse: Hay personas que temen mostrar sus sentimientos, pensamientos y deseos por miedo al rechazo, al juicio o al conflicto2. Esto les impide abrirse y confiar en los demás, y también recibir lo que los demás les ofrecen.

3-La falta de claridad para detectar nuestras emociones: Hay personas que no saben identificar lo que sienten, ni expresarlo adecuadamente2. Esto les dificulta entender sus propias necesidades y las de los demás, y también regular sus emociones de forma saludable.

4-Las experiencias pasadas dolorosas: Hay personas que han sufrido traumas, abusos o maltratos en el pasado, que les han dejado heridas emocionales que no han sanado2. Esto les hace tener dificultades para confiar, perdonar y amar a los demás, y también a sí mismos.

5-Las expectativas demasiado altas: Hay personas que esperan demasiado de los demás, o de sí mismos, y se frustran cuando no se cumplen sus deseos. Esto les impide aceptar la realidad tal como es, y valorar lo que tienen y lo que reciben.

6-El tratar de someter y condicionar la vida de aquellos que recibimos también puede ser un gran problema para recibir a otro: Esto se debe a que, al hacerlo, estamos violando su libertad, su dignidad y su autonomía, y no estamos respetando su individualidad y su diversidad. Además, estamos imponiendo nuestra voluntad, nuestros intereses y nuestros criterios sobre los suyos, sin tener en cuenta sus necesidades, sus deseos y sus opiniones.

Este problema puede darse en diferentes ámbitos, como el familiar, el educativo, el laboral o el religioso, y puede tener diversas consecuencias negativas, tanto para los que reciben como para los que imponen. Algunas de estas consecuencias son:

Para los que reciben: pueden sentirse humillados, manipulados, coaccionados, frustrados, angustiados, resentidos, rebeldes o sumisos. Pueden perder su autoestima, su confianza, su creatividad, su iniciativa y su capacidad de decisión. Pueden desarrollar problemas psicológicos, como depresión, ansiedad, estrés, fobias o traumas. Pueden aislarse, rechazar o agredir a los que les someten o condicionan, o a otras personas.

Para los que imponen: pueden sentirse superiores, poderosos, satisfechos, orgullosos o seguros. Pueden reforzar su ego, su autoridad, su control y su influencia. Pero también pueden sentirse insatisfechos, inseguros, temerosos, culpables o vacíos. Pueden perder el respeto, el afecto, la confianza, la comunicación y la colaboración de los que reciben. Pueden generar conflictos, tensiones, hostilidades o rupturas.

Para evitar este problema, es necesario practicar el amor verdadero, que se basa en el respeto, la comprensión, la aceptación, la tolerancia, la comunicación, la cooperación y la generosidad. También es importante reconocer y valorar la dignidad, la libertad, la autonomía, la individualidad y la diversidad de cada persona, y fomentar su desarrollo integral y su felicidad. Así podremos recibir a otros con amor, y también dejarnos recibir por ellos.

 

Para superar estos obstáculos, es necesario trabajar en nuestro desarrollo personal, en nuestra autoestima, en nuestra inteligencia emocional y en nuestra espiritualidad. También es importante buscar ayuda profesional cuando sea necesario, y apoyarnos en nuestra comunidad de fe. Así podremos recibir a otros con amor, y también dejarnos recibir por ellos.

 

7-También podemos confundir los términos y sentir que nosotros somos los anfitriones y no los recibidos.

Esto puede traer un gran conflicto, porque implica una actitud de soberbia, de superioridad, de imposición o de dominio sobre los demás. Al hacerlo, estamos negando el hecho de que todos somos invitados y huéspedes de Dios, y que Él es el único que nos recibe con amor y gracia. También estamos olvidando que todos somos iguales, hermanos e hijos de Dios, y que nadie tiene más derecho o mérito que otro para recibir su bendición.

Este conflicto puede manifestarse en diferentes formas, como la envidia, la rivalidad, la competencia, la exclusión, la discriminación, la intolerancia o la violencia. Estas actitudes pueden dañar nuestra relación con Dios, con nosotros mismos y con los demás, y alejarnos de su voluntad y de su reino.

Para evitar este conflicto, es necesario practicar la humildad, la gratitud, la sencillez, la generosidad, la hospitalidad y la comunión. También es importante reconocer y agradecer el don de la vida, de la fe y de la salvación que Dios nos ha dado, y compartirlo con los demás. Así podremos recibir a otros con amor, y también dejarnos recibir por ellos.

Muchas veces los cristianos nos olvidamos que los demás solo pueden recibirnos en sus vidas con lo que tienen.

EL REY RECIBIDO

Una imagen de la cueva del sabio sentado en el suelo y el rey en la silla para el cuento indú del rey y el sabio

Un rey poderoso y orgulloso decide visitar a un sabio que vive en el bosque, para comprobar si es tan sabio como dicen. El sabio lo recibe con una sonrisa, y le ofrece el único asiento que tiene en su cabaña. El rey se sienta en el banco, y el sabio se sienta en el suelo. El rey se molesta por este gesto, y cree que el sabio lo está desafiando. Le pregunta por qué se sienta en el suelo, y el sabio le responde que lo hace por respeto y hospitalidad, ya que él está acostumbrado a sentarse en el suelo, y quiere que el rey esté cómodo. El rey se irrita más, y le reprocha al sabio que no le ha ofrecido nada más que un banco, y que su cabaña es miserable. El sabio le explica que no tiene nada más que ofrecerle, solo su cabaña, su conocimiento, el agua, los frutos del bosque, el canto de los pájaros, el silencio de la meditación, su respeto y su gratitud. El rey se queda sin argumentos, y se da cuenta de que el sabio es realmente sabio, y que él ha sido grosero y arrogante. Se avergüenza de su actitud, y se disculpa con el sabio. Le pide que le enseñe el camino de la humildad y la bondad. El sabio acepta, y le dice que el verdadero maestro está dentro de él. El rey se queda con el sabio durante varios días, aprendiendo sus lecciones y compartiendo su vida. El rey se vuelve más humilde y bondadoso, y el sabio se vuelve más alegre y amigo. Ambos se benefician de la visita, y se convierten en buenos amigos.

 

Generalmente el recibir o no recibir a nuestros hermanos se debe a enemistad.

Los samaritanos se habían enemistado con los judíos, esta era la segunda vez que Jesús pasó por allí, otra vez en el tiempo de la pascua y estaba el problema de la doctrina, el odio , la envidia y los conflictos. Todo esto hacia que no recibieran en esta ocasión a los apóstoles y a Jesús.

 

Jesús para preparar su viaje, envía mensajeros delante de él a buscarle un lugar donde alojarse. Sin embargo, los mensajeros llegan a una aldea de samaritanos, que son un pueblo considerado impuro y pecador por los judíos.

(aná-) significa “de nuevo, otra vez, nuevamente”. Se usa para indicar una repetición o una reiteración de algo que ya se ha hecho o dicho.

(lémpto). Se usa para indicar una acción posterior o consecuente a otra acción anterior.

 



Los samaritanos no quieren recibir a Jesús ni a sus discípulos, porque saben que se dirigen a Jerusalén, donde se celebrará la Pascua judía.

Los discípulos de Jesús, Santiago y Juan se enfurecen al ver esta actitud hostil y desagradecida hacia su maestro. Le preguntan a Jesús si quiere que manden caer fuego del cielo para consumirlos.

En tiempos de Elías, Baaal era una deidad cananea que era adorada por muchos pueblos vecinos de Israel. Baal era el dios responsable de la lluvia, el trueno, el relámpago y el rocío. Los profetas de Baal eran crueles y vengativos porque practicaban ritos sangrientos y violentos para tratar de agradar a su dios. Allí, los profetas de Baal le imploraron a su dios desde la mañana hasta el mediodía, haciéndose cortes en sus brazos y piernas, para que enviara fuego sobre el altar que habían preparado. Sin embargo, no hubo ninguna respuesta de Baal. Y si respondió el Dios de Elías... detrás de esta divinidad estaba Jezabel que mató a muchos de los profetas del Dios de Israel a quienes mantenía.

1 Reyes 18:19 Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de Jezabel.

1-El cristianismo no tiene como prioridad cambiar de religión a la gente, sino que conozcan el espíritu de Cristo... para que cambien de espíritu en sus vidas y reacciones.

 

UN CAMBIO DE ESPIRITU

el samurai tiene una paloma posada en sus manos

Había una vez un guerrero llamado Hiroshi. Hiroshi era temido en todo el reino por su espíritu iracundo y vengativo. Cualquier desafío a su honor era respondido con furia y violencia.

Un día, Hiroshi se encontró con un anciano llamado Isamu. Isamu era un jardinero zen, conocido por su espíritu tranquilo y compasivo. A pesar de la actitud hostil de Hiroshi, Isamu lo trató con amabilidad y paciencia.

Hiroshi, intrigado por la serenidad de Isamu, decidió visitarlo todos los días. Observaba a Isamu trabajar en su jardín, moviendo las piedras y las plantas con cuidado y atención. Aunque al principio no entendía, Hiroshi comenzó a apreciar la paz y la tranquilidad del jardín.

Con el tiempo, Hiroshi comenzó a cambiar. Su espíritu iracundo y vengativo se suavizó. Comenzó a responder a los desafíos con paciencia y comprensión, en lugar de ira y violencia. Aprendió a encontrar la paz en la tranquilidad del jardín y en la compañía de Isamu.

Desde aquel día, Hiroshi ya no fue un guerrero temido, sino un hombre de paz. Su espíritu había cambiado de uno iracundo y vengativo a uno dulce, paciente y compasivo, todo gracias a la bondad y la paciencia de Isamu.

Este cuento zen nos enseña que incluso el más iracundo puede cambiar a través de la paciencia, la compasión y la quietud.

 

 

Jesús ya llamaba “Hijos del trueno” a Juan y Jacobo desde que los llamó al apostolado.

Marcos 3:17 a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan hermano de Jacobo, a quienes apellidó Boanerges, esto es, Hijos del trueno;

No es que adoraran a Baal, no, era por la tendencia a actuar en forma vengativa y cruel.

Ellos tenían que ser pulidos espiritualmente.

Jesús reprende con severidad a sus discípulos por haber pensado en usar la violencia para castigar a los samaritanos. Les dice: "Vosotros no sabéis de qué espíritu sois; porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas."

Jesús sabía que ellos eran humanos y pecadores, y que necesitaban la gracia de Dios para cambiar. Él no quiso hacerles daño ni desanimarlos, sino alentarlos a seguir adelante con su llamado. 

 Con estas palabras, Jesús les enseña dos lecciones importantes:

  • La primera lección es que el espíritu con el que se actúa determina el resultado final. Si se actúa con odio y violencia, se pierde la oportunidad de hacer el bien y se corre el riesgo de causar más daño. Si se actúa con amor y paz, se puede alcanzar la misericordia divina y se puede salvar muchas vidas.
  • La segunda lección es que Jesús tiene un plan diferente al nuestro para salvar al mundo. Él no vino para imponer nuestra justicia o nuestra voluntad sobre los demás, sino para ofrecerles su gracia y su perdón. Él no vino para juzgar o condenar a nadie, sino para acogerlo como hijo o hija suyo´




San Cirilo de Jerusalén comenta: El Señor que sabe todas las cosas antes de que sucedan, sabía que sus emisarios no habían de ser recibidos por los samaritanos. Sin embargo, les mandó que fuesen, porque acostumbraba a hacer todas las cosas para instrucción de sus discípulos. Subía a Jerusalén cuando se aproximaba el tiempo de su pasión; y para que no se escandalizasen cuando le vieran padecer, considerando que también ellos debían ser pacientes cuando los ultrajasen, hizo preceder, como cierto preludio, la repulsa de los samaritanos. Y los instruyó de otro modo; habían de ser los doctores del mundo y habían de recorrer las ciudades y aldeas predicando la doctrina evangélica; y les habría de ocurrir que algunos no recibiesen la sagrada predicación, como no permitiendo que Jesús permaneciese con ellos. Les enseñó, pues, que cuando anunciasen la celestial doctrina, debían estar llenos de paciencia y mansedumbre, no demostrarse hostiles, ni iracundos, ni vengativos contra sus perseguidores. Pero aún no estaban dispuestos para ello, e incitados por un celo indiscreto, querían que bajase fuego del cielo sobre ellos. Prosigue: «Al verlo sus discípulos Santiago y Juan, dijeron: «Señor, ¿quieres que digamos que baje fuego del cielo y los consuma?»».

 

En la actualidad se da por hecho de que, si una persona tiene un coeficiente de inteligencia alto, pero no tiene capacidad para controlar los efectos de sus emociones y las de otro tendrá una inteligencia cognitiva pero no emocional y por tanto día y tras día lanzara sus redes de relaciones humanas y volverá de vacío.

Goleman , definió la INTELIGENCIA EMOCIONAL como la capacidad para reconocer y manejar nuestros propios sentimientos, motivarnos y monitorear nuestras relaciones.

El monitoreo, a rasgos generales, consiste en la observación del curso de uno o más parámetros para detectar eventuales anomalías.

 

-Las relaciones humanas son complejas, no solo tratan sobre asuntos racionales, sino que también emocionales y en este segundo sentido algunos tenemos serias dificultades ya que de pronto nos mueven fuerzas que no entendemos ni comprendemos (truenos).

 

Marcos 3:17 Y á Jacobo, hijo de Zebedeo, y á Juan hermano de Jacobo; y les apellidó Boanerges, que es, Hijos del trueno;

 

El cómo se produce exactamente un rayo es un proceso que la ciencia no comprende absolutamente del todo y del que existen varias explicaciones (sin mencionar las consabidas controversias).

El rayo es una de las fuerzas más poderosas y devastadoras del mundo, pero en el 80% de los casos que uno impacta en un ser humano, este sale con vida. Empleando imágenes por satélite, se ha llegado a estimar que cada segundo caen unos 44 rayos en el mundo.

El rayo ocurre cuando la diferencia de potencial eléctrico entre dos puntos supera un límite de aproximadamente 30.000 voltios.

El rayo es la descarga eléctrica propiamente dicha, puede ocurrir de una nube a otra o del suelo a la nube (se creía que el arco eléctrico saltaba de la nube a la tierra, pero los estudios hechos con cámaras de alta velocidad se demostró que era, al contrario).

A veces también vemos personas que continuamente echan la culpa al cielo de lo que pasa en la tierra cuando son ellos el origen literal de la misma destrucción de la que se culpa al cielo.

El trueno es consecuencia también del rayo, la descarga eléctrica calienta tanto a las masas de aire a su alrededor que esta se expande y contrae violentamente, produciendo el característico sonido de explosión, que luego oímos alejarse, a esto le decimos trueno. Es el sonido que genera el rayo.

Dicho lo cual es ilustrativo ver que Jesús a pesar de llamar a Jacobo y Juan como hijos del trueno los llamara a su lado…

para mi es un misterio cómo personas potencialmente destructivas pueden terminar siendo remendadas.

 

¿Cómo serian Jacobo y Juan hijos de de Zebedeo y Salomé para merecer un apellido así de parte de Jesús?

 

Debieron de ser sin duda hombres exaltados y ardorosos, propensos a la cólera, a quienes imaginamos cogiéndose unos cabreos de órdago cuando, después de una dura jornada en el lago Tiberíades, volviesen de vacío a Betsaida. Más de una vez lanzarían airadas maldiciones a los peces remisos a caer en sus redes; más de una vez los mandarían al infierno", que es lo que también quisieron arrojar sobre los inhospitalarios samaritanos cuando, después de la Transfiguración, Jesús los mandó allí con una misión de paz.

¿Cómo osaban esos samaritanos negarle pan y posada a un hombre que acababan de ver traspasado de luz y lleno de gozo y belleza en el monte Tabor?

Lucas 9:49 Entonces respondiendo Juan, dijo: Maestro, hemos visto a uno que echaba fuera demonios en tu nombre; y se lo prohibimos, porque no sigue con nosotros.

9:50 Jesús le dijo: No se lo prohibáis; porque el que no es contra nosotros, por nosotros es.

 

-La tendencia de un hijo del trueno es la de PROHIBIR A OTROS INCLINANDOSE A LA EXCLUSIVIDAD.

 

1-Así que el primer control de Jesús a los hijos del trueno es decirles que se dejen de prohibir a otros y que se dejen de ser personas exclusivistas.

 

Una persona exclusivista y controladora debe ser abierta a los demás y monitorizada por Jesús.

Deja que Jesús te muestre tus parámetros emocionales para mostrarte el cómo puedes controlarlos con su ayuda.

 

Lucas 9:51 Cuando se cumplió el tiempo en que él había de ser recibido arriba, afirmó su rostro para ir a Jerusalén.

9:52 Y envió mensajeros delante de él, los cuales fueron y entraron en una aldea de los samaritanos para hacerle preparativos.

9:53 Mas no le recibieron, porque su aspecto era como de ir a Jerusalén.

9:54 Viendo esto sus discípulos Jacobo y Juan, dijeron: Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma?

9:55 Entonces volviéndose él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois;

9:56 porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas. Y se fueron a otra aldea.

Mas adelante estos hombres emocionalmente exaltados se hacen los tontitos manipulando a su mama, para que sus ambiciones resulten menos descaradas, para que su apetito de honores quede atemperado, mitigado, hermoseado por la solicitud materna".

Santiago y Juan actúan como los postulantes maquinadores en busca de enchufe, que en lugar de presentar su candidatura a pecho descubierto recurren a intermediarios; y ya se sabe que no hay mejor intermediario que la madre propia, que es quien mejor y con mayor sentimiento resalta las prendas del postulante, ablandando el corazón del que tiene potestad para adjudicar cargos o repartir mercedes. Pero a los bravucones Zebedeos no les valió en esta ocasión la triquiñuela:

Marcos 10:35 Entonces Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, se le acercaron, diciendo: Maestro, querríamos que nos hagas lo que pidiéremos.

10:36 El les dijo: ¿Qué queréis que os haga?

10:37 Ellos le dijeron: Concédenos que en tu gloria nos sentemos el uno a tu derecha, y el otro a tu izquierda.

10:38 Entonces Jesús les dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo bebo, o ser bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado?

10:39 Ellos dijeron: Podemos. Jesús les dijo: A la verdad, del vaso que yo bebo, beberéis, y con el bautismo con que yo soy bautizado, seréis bautizados;

10:40 pero el sentaros a mi derecha y a mi izquierda, no es mío darlo, sino a aquellos para quienes está preparado.

10:41 Cuando lo oyeron los diez, comenzaron a enojarse contra Jacobo y contra Juan.

10:42 Mas Jesús, llamándolos, les dijo: Sabéis que los que son tenidos por gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y sus grandes ejercen sobre ellas potestad.

10:43 Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,

10:44 y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos.

10:45 Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.

-No debemos olvidar que antes de esta escena fue la madre la que preparó la entrevista a solas con Jesús.

Mateo 20:20 Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, postrándose ante él y pidiéndole algo.

20:21 El le dijo: ¿Qué quieres? Ella le dijo: Ordena que en tu reino se sienten estos dos hijos míos, el uno a tu derecha, y el otro a tu izquierda.

 

Podemos reconciliar ambos relatos entendiendo a la madre como mera intermediaria de las ambiciones de sus hijos.

Ya tenemos el cuadro de los hijos de Zebedeo, ahora rebobinamos y observamos lo que estaban haciendo pacientemente con una red para conseguir buenos resultados... el discipulado de Jesús puede arreglar nuestra INTELIGENCIA EMOCIONAL y hacernos mejores en nuestras relaciones humanas y ese trabajo es el que en nuestras vidas se identifica con el término del que les voy a hablar a partir de ahora.

Marcos 1:19 Pasando de allí un poco más adelante, vio a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan su hermano, también ellos en la barca, que remendaban “KATARTIZÓ” las redes.

1:20 Y luego los llamó; y dejando a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros, le siguieron.

Mateo 4:21 Pasando de allí, vio a otros dos hermanos, Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano, en la barca con Zebedeo su padre, que remendaban “KATARTIZÓ” sus redes; y los llamó.

KATARTOISAI significa hacer ARTIOS (Apto, equipar completamente)

-El trabajo de remendar redes tiene un objetivo “PREPARSE PARA CONSEGUIR MEJORES RESULTADOS AL SIGUIENTE LANZAMIENTO”

“KATARTIZÓ”= RESTABLECER, PONER EN ORDEN, INDICA AJUSTE Y ADAPTACIÓN MUTUOS

 

William Barclay dice que esta palabra tiene dos grupos de significados:

a) Ajustar, restaurar, poner en orden.

b) Equipar o habilitar algo para un propósito determinado.

Por ejemplo, se usa con respecto a la habilitación de un barco o de un ejército cuando son completamente equipados, armados y formados en orden de batalla.

Él desarrolla un cuadro con el término 'perfeccionar' en el sentir de Pablo, y reconoce las siguientes cuatro acepciones:

a) Proveer con lo necesario (como un padre) (1ª Tes. 3:10).

1ª Tesalonicenses 3:10 orando de noche y de día con gran insistencia, para que veamos vuestro rostro, y completemos “KATARTISAI” lo que falte a vuestra fe?

-Es mediante presencia que podemos remendar la fe de los hombres, orar para poder hacerlo de forma presencial es muy lindo.

b) Sanar las coyunturas y tejidos (como un médico) (1ª Cor. 1:10).

1ª Corintios 1:10 Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos “KATARTIZÓ” en una misma mente y en un mismo parecer.

-Estar perfectamente unidos implica “REMENDADOS UNOS A OTROS”, esto significa arreglar lo que no funcionó ayer para que funcione mejor a partir de hoy entre los creyentes.

RESTABLECER, PONER EN ORDEN, INDICA AJUSTE Y ADAPTACIÓN MUTUOS, es una disposición al ceder mutuo en la búsqueda de la concordia como OBJETIVO.

c) Reparar o restaurar a una posición (como un constructor) (Gál. 6:1).

Gálatas

Capítulo 06

6:1 Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle “KATARTIZÓ” con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.

-Los espirituales son los expertos en REMENDAR PERSONAS

d) Alimentar para el crecimiento homogéneo (como un pastor) (Ef.4:12).

Efesios 4:12 a fin de perfeccionar “KATARTISMON” a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,

-Literalmente “REPARACIÓN DE LOS SANTOS”, lindo ministerio este.

-Los expertos en la educación han definido 5 aspectos que deberíamos de enseñar a nuestros jóvenes en las escuelas y que la educación intelectual cognitiva no está aportando en la actualidad, yo creo también que en nuestras Iglesias enseñamos biblia y teología doctrina etc….

pero no nos podemos olvidar de que Jesús empezó por las emociones pues solo reparando estas el discípulo puede ser COMPLETADO PARA SER APTO Y NO FRACASAR.

e- Autoconciencia; Habilidad de reconocer y entender sus emociones, estado de ánimo e impulsos, así como su efecto en los demás.

1ª Juan 1:8 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.

f- Autorregulación; Habilidad para controlar o redirigir impulsos y estados de ánimo.

Juan 2:10 El que ama a su hermano, permanece en la luz, y en él no hay tropiezo.

g-Motivación; Pasión para trabajar por razones que van más allá del dinero y el estatus. Propensión a lograr metas con energía y persistencia.

Apocalipsis de Juan (hijo del trueno) 1:9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.

h- Empatía: Habilidad para entender la apariencia emocional de los temas. Habilidad para tratar a las personas de acuerdo con sus reacciones emocionales.

1ª Juan 4:17 En esto se ha perfeccionado el amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio; pues como él es, así somos nosotros en este mundo.

4:18 En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor.

4:19 Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.

4:20 Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?

4:21 Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano.

i- Habilidades Sociales; Pericia en el manejo y construcción de redes de relaciones.

Habilidad para encontrar un espacio común y constituir simpatía.

1ª Juan 5:16 Si alguno viere a su hermano cometer pecado que no sea de muerte, pedirá, y Dios le dará vida; esto es para los que cometen pecado que no sea de muerte. Hay pecado de muerte, por el cual yo no digo que se pida.

5:17 Toda injusticia es pecado; pero hay pecado no de muerte.

5:18 Sabemos que todo aquel que ha nacido de Dios, no practica el pecado, pues Aquel que fue engendrado por Dios le guarda, y el maligno no le toca.

5:19 Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno.

5:20 Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.

5:21 Hijitos, guardaos de los ídolos. Amén.

De esta manera vemos como Juan el hijo del trueno ha reparado sus redes y ha sido equipado como pescador de almas.

Cualquiera de nosotros debe reconocer que aun debemos REMENDAR NUESTRAS REDES.

 

 Bendiciones



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