La razón puede ayudar a la fe a
explicarse, y puede advertir cuándo el creyente no es coherente, en su
inteligencia o en su vida, con su fe.
Y así mismo la fe ayuda a la razón
a poner los pies sobre la realidad de un universo creado y unas leyes de carácter
ético al que no alcanzan las demás criaturas excepto el hombre como criatura trascendente.
En
la discusión sobre el creer o no, hay dos presupuestos:
1-Que
no existe Dios Problema: Si no hay autoridad creacional
tampoco hay autoridad moral
2-Que
si existe Dios Problema: Entonces si hay una autoridad
Moral.
Si usted no cree en un Dios creador su manera de vivir se verá
afectada en cuanto no tendrá ninguna autoridad que le ponga límites morales.
Romanos 1:18-20 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
La
culpabilidad del hombre
18 Porque
la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de
los hombres que detienen con injusticia la verdad;
19 porque
lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó.
20 Porque
las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente
visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas
hechas, de modo que no tienen excusa.
¿Qué
es injusticia? Acción contraria a la
justicia.
¿Qué
es excusa? Razón o argumento que se
da para demostrar que alguien no es culpable.
Debemos de creer porque es la
única forma de mantener la autoridad de las RAZONES MORALES que la mayoría de
las culturas han adoptado mediante el progreso y porque nadie puede dudar de
que en esos progresos morales la creencia en un Dios supremo han tenido un
claro protagonismo.
¡Pero
el asunto no es solo las condiciones para la vida! …..
Batsell
Barrett Baxter pregunta, ¿Por qué el hombre debe
preocuparse por las demandas de la conciencia si no es nada más una colocación
casual de átomos?
La moral y la ética son patrones
universalmente
aceptados entre la familia de los seres humanos. Por
tanto, su origen debe ser explicado.
Existen solamente dos posibles
fuentes.
1-La moralidad y la ética se
originaron en la mente de Dios. Quien es la fuente de bondad,
2- La moralidad y la ética se
originaron en el mismo hombre.
¿Cómo fijaremos nuestros
principios?
¿Deberíamos aprobar el
aborto?
¿Estimularemos la
maternidad de alquiler?
¿Deberíamos defender la
pena de muerte?
¿Recomendaremos la eutanasia?
¿ES BUENO IMPLANTAR LA
LEY DE LA SELVA?
¿Por qué creer que unos
principios morales son buenos y otros malos?
-Un Guepardo no es afligido por la culpabilidad
después de matar a una gacela para su almuerzo.
-Un perro no experimenta
remordimiento después de robar el hueso de otro perro.
Sin embargo el hombre, que también se supone
que ha evolucionado, siente culpa y remordimiento cuando comete ciertos actos que
violan las normas aceptadas de la moralidad y la ética.
Dr. Richard Dawkins (El apóstol
del ateísmo), una vez admitió que creer en la evolución y después actuar
consecuentemente sobre esa creencia produciría “una
repugnante sociedad en la cual vivir”.
¿Puede la materia crear
conceptos éticos y morales?
Sea que el incrédulo esté dispuesto
a admitirlo o no, si no existe Dios, entonces, el hombre vive en un ambiente
donde “cualquier cosa vale”.
Dos opciones:
1-El hombre es un animal
evolucionado
2-El hombre es un ser con
conciencia moral y ética
Entre estos dos conceptos, ¿Usted
cuál cree?
Para explicar el origen de la ética
y moral, la biblia enseña dos cosas que son razones poderosas para creer.
A-El hombre ya fue creado a IMAGEN
Y SEMEJANZA de quien le creó. (Por tanto es diferente del resto de las
criaturas).
Génesis 1:26 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
26 Entonces
dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra
semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las
bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.
B-Dios puso un maestro interno
llamado conciencia.
Salmos 16:7 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
7 Bendeciré a Jehová
que me aconseja;
Aun en las noches me enseña mi conciencia.
Aun en las noches me enseña mi conciencia.
La moralidad verdadera está basada
en el factor de la inmutable naturaleza de un Dios Todopoderoso. Él es eterno
(1 Timoteo 1:17), justo y recto (Salmos 89:14), siempre consistente (Malaquías
3:6).
En un sentido esencial, solamente
Dios es bueno (Marcos 1:18). Además, ya que Él es perfecto (Mateo 5:48), la
moralidad que viene de tal Dios es buena, inmutable, justa y consistente—exactamente
lo opuesto al relativismo, determinismo, o a la ética situacional del mundo.
Cuando la gente sugiere que los
seres humanos sienten responsabilidad por acciones equivocadas, reconocen que
hay efectivamente dentro de cada hombre, mujer y niño, un sentido de
responsabilidad moral que viene del hecho de que Dios
es nuestro Creador (Salmos 100:3) y que nosotros hemos sido hechos en Su imagen
espiritual (Génesis 1:26,27).
Como el alfarero tiene el derecho de regir sobre
la arcilla que molda (Romanos 9:21),
así nuestro Hacedor tiene el derecho soberano sobre Su creación ya que en Su
mano “está el alma de todo viviente” (Job 12:10).
Como el personaje bíblico Job
aprendió demasiado tarde; Dios no es un hombre
con el que una persona pueda discutir. (Job 9:32).
En absoluto, Dios hace, manda, y aprueba
lo que es bueno (Salmos 119:39,68). Lo que Él ha mandado resulta de lo que Él
es, y por lo tanto también es bueno. En el Antiguo Testamento, el profeta Miqueas declaró de Dios: “Oh hombre, él te ha declarado lo
que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar
misericordia,
y
humillarte ante tu Dios.” (Miqueas 6:8).
En el Nuevo Testamento, el apóstol
Pedro escribió:
“Sino,
como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra
manera de vivir” (1 Pedro 1:15).
Santidad
La idea principal de la ética
basada en Dios concierne a la relación del hombre con su Creador.
Dios, en Sí mismo, es el estándar inmutable de
la ley moral. Su perfecta naturaleza santa es el fundamento sobre lo que es lo “correcto” e “incorrecto”,
“bueno” y “malo” está
constituido.
La imagen de Dios fue plasmada en
la conciencia de cada ser humano.
El incrédulo tiene diversas teorías
para explicar lo moral y lo ético.
1-El relativismo
piensa que cada cultura crea su ética y su moral.
En ese caso no hay ningún código ético o moral todos serian respetables ya que
son productos de sus culturas... la cultura seria la autoridad en materia de ética
y moral… Pero entonces… ¿QUE FUERZA TRAE CAMBIOS QUE LA MEJORA?
2- El hedonismo
básicamente dice que si una acción provee placer a la
persona que lo está haciendo, y si realmente no daña a nadie, entonces
es aceptable…. ¡Pero es obvio que si este hedonismo se implanta en el mundo perderíamos
la solidaridad, el amor y el respeto por los demás!
3- El Utilitarismo
es
el sistema de creencia que sugiere que lo “bueno” es determinado por lo que
produce la mayor cantidad de placer para el mayor número de gente. ¿Y las minorías?
En el fondo de nuestro ser sabemos que eso no es justo.
4- El Situacionísmo
es
la idea de que algo es “correcto” porque una persona decide que es correcto en algún
caso dado. De acuerdo con esta filosofía, no hay nada que siempre es correcto o
que siempre es incorrecto; cada situación individual determina la corrección de
una acción.
5- El Determinismo
es
la idea de que el hombre no es realmente responsable por sus acciones. Esta
creencia clama que el largo proceso evolutivo ha instalado en el hombre ciertos
instintos que determinan sus acciones.
Entonces, de acuerdo con este
concepto, una persona puede hacer cualquier cosa que siente hacer y no ser
tachado como responsable por la misma. Por ejemplo, si una persona roba algo,
¿quién es responsable? El determinismo clamaría que su “pasado
evolutivo” es responsable, o que “sus genes le
impulsaron a hacerlo”.
Aun el sentido común nos dice que
toda persona racional es responsable por sus propios actos—si no, ¡por qué nos molestaríamos teniendo leyes, policías, cortes,
jueces, o cárceles!
Pero lo que creemos es lo que regula nuestra moral y ética.
Según Charles Darwin, los miembros
“más débiles” de la sociedad son incompetentes, y bajo las leyes de la
naturaleza, normalmente no sobrevivirían.
Ya que la naturaleza “selecciona en
contra” del animal más débil, y ya que el hombre es visto como un animal, ¿por
qué debería el hombre esperar un mejor trato?
Hay algo que solo tiene el hombre “CONCIENCIA” y una imagen y semejanza de un ideal divino.
Por eso necesitamos creer y vivir
en un universo moral y ético a diferencia de los animales.
¿Usted seguirá su instinto como los
animales o creerá en unos principios morales y éticos de origen superior al
reino animal?
La Apologética cristiana no rehúye
utilizar también argumentos filosóficos.
Porque en él vivimos, y nos
movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque
linaje suyo somos.
Dos filósofos griegos pensadores de la antigüedad: Arato
y Cleanto citaron las frases que ahora utiliza
Pablo.
La fe y la razón de por sí no se oponen
porque tienen ambas como origen a Dios.
No serviría
una fe “fideísta” (incapaz de argumentar con la
razón); como tampoco serviría una fe de tipo racionalista, incapaz de intuir el origen de
leyes y la fuente de lo moral y ético.
Paley (Autor de la teología natural), invitó a sus
lectores a que imaginar una piedra y un reloj. Uno puede preguntarse cómo han
llegado hasta allí, así como su origen. Una conclusión apropiada para la piedra
es que siempre ha estado ahí, pero para el reloj, argumentaba Paley, ese
pensamiento no es correcto. Eso es debido a las complejas características del
reloj, cada pieza del reloj es necesaria para que éste funcione correctamente,
por lo que se sugiere la existencia de un diseño que necesita de un diseñador.
Aplicando el mismo razonamiento a humanos y otros seres vivos, Paley argumentó
que se necesitaba de un diseñador: Dios.
EL PAJARO
CARPINTERO
David Banning dice
lo siguiente acerca del pájaro carpintero. “Este pájaro golpea con su pico como
un martillo en el tronco del árbol 15 veces cada segundo...
Con
cada picotazo, el pájaro tiene que absorber una fuerza 1,000 veces más que la
gravedad.
¿Cómo este pájaro puede seguir picoteando sin que explote la cabeza?
Su cráneo está reforzado con hueso,
su pico es más fuerte que el de la mayor parte de los pájaros. Plumas
especiales cubren sus narices para que el serrín y el polvo no entren. Su
cráneo y su pico son separados por un pequeño amortiguador el cual suaviza el
impacto. También tiene músculos especiales los cuales separan el cerebro del
pico, cada vez que picotea.
¿Cómo llegó a tener todas
estas cualidades maravillosas?
La
complejidad en el universo
–
la tierra y el sistema solar están perfectamente diseñados para la vida. David
Banning señala, “El sol se encuentra justamente en el lugar correcto, 149,6 millones km
de la tierra.
Si se encontrara solamente un poco
más cerca, moriríamos del calor.
Si se encontrara un
poco más lejos todo nos congelaríamos de frío...
La tierra gira al estar en órbita alrededor del sol. También es
inclinado a 23
grados. La gira y la inclinación hacen posible
las estaciones...
La tierra es el único planeta con el
oxígeno libre, el cual es esencial para la vida. Es el
único planeta que tiene agua sobre su superficie,
también algo esencial para la vida...
La luna es justamente el tamaño y queda la distancia justa de la
tierra para sostener la vida. Si
no hubiera una luna, habría marea y los mares se
estancarían. Si la luna estuviera más cerca de la
tierra, la marea sería demasiada fuerte y cubriría la tierra con agua.
El cerebro humano procesa más de
un millón de mensajes por segundo.
El cerebro funciona de
manera muy distinta que otros órganos. Hay inteligencia en él, la habilidad de
razonar, generar sentimientos, de soñar y planear, de actuar, y relacionarse a
otras personas.
El cerebro humano es el objeto más
complejo en el universo conocido, con miles de millones de chisporroteantes
neuronas conectadas por billones de sinapsis. Ningún problema científico se le
puede comparar. Sería una estupidez predecir que nunca comprenderemos cómo el
cerebro da origen a la mente. Pero el problema es tan difícil que sería igual
de estúpido predecir que lo lograremos.
EL VERSICULO MAS PODEROSO DE LA BIBLIA
La
Biblia comparada con otros libros de la antigüedad
El profesor M. Montiero-Williams
dijo que al comparar la Biblia con otros libros de la antigüedad, “Hay un abismo tan grande entre ella” (la Biblia) “y los
llamados libros sagrados del oriente, el cual los separa uno del otro
rotundamente, completamente y para siempre...es un verdadero abismo el cual no
puede ser cruzado por ninguna ciencia ni pensamiento religioso.”
Bernard Ramm
ha dicho, “las palabras de Jesús no son grandes porque sobrepasan a las de
otros en forma de estadística, sino porque:
1-
Son leídas más,
2-
Citadas más,
3-
Amadas más
4-
Creídas más
5-
Traducidas más
6-
Son las palabras más grandes jamás habladas.
¿En
qué consiste su grandeza?
Su
grandeza se encuentra en la espiritualidad clara y lúcida al tratar en forma
clara, definitiva y autoritaria con los problemas más grandes que afectan al
ser humano; mayormente....
¿Quién es Dios?
¿Dios me ama?
¿Dios quiere cuidarme?
¿Qué debo hacer para agradarle?
¿Cómo El ve mi pecado?
¿Cómo debo tratar a otros?
En esta semana en una de mis publicaciones me
comentaba alguien que la biblia sobra que solo hay que ser bueno.
Y
yo respondía que para ser bueno uno tiene que tener una autoridad en moral para
hacer una comparativa y poder definir lo que es bueno y lo que es lo malo.
Citas de ateos y agnósticos famosos
Voltaire “Aparte de algunos poetas, la multitud de los seres humanos
no es nada sino una asamblea de criminales desafortunados y el globo no
contiene nada sino cadáveres.”
Robert Ingersoll dijo
lo siguiente en los servicios fúnebres de su hermano “ “La
vida es un valle estrecho entre las dos cumbres frías y áridas de la
eternidad...Gritamos y pedimos socorro y la única respuesta es el eco de
nuestro propio grito”
Bertrand Russell dijo
en cuanto al hombre que su… “su origen, su crecimiento,
sus esperanzas, sus temores, sus amores y creencias no son nada sino la
colocación casual de átomos”.
Hay
una batalla ahora mismo y nadie puede ser neutral, el hombre sin fe en Dios no
tiene una autoridad moral, no tiene el argumento trascendente más allá de
considerarse fruto del capricho de unos pocos átomos.
Paley tenía razón, los animales tienen instinto natural, no tienen conciencia
no pueden darse cuenta de lo bueno ni de lo malo….
¿De
dónde le viene al hombre la conciencia?
Romanos 2:14-15 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
14 Porque
cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley,
éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos,
15 mostrando
la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia,
y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos,
El argumento ontológico
Ontologia es el estudio de la existencia de algo
Un fraile
italiano del siglo XI, San Anselmo de Canterbury (1033-1109), va a ser el gran precursor de las
demostraciones divinas. En sus
obras leemos varias que fueron muy utilizadas por filósofos posteriores, si
bien, la que le da fama es la que se ha denominado tradicionalmente como argumento ontológico.
Vamos a verlo.
Si a
cualquiera (incluso al insensato
ateo, que diría el mismo San Anselmo) le preguntamos ¿cuál sería la idea más grandiosa, más perfecta que
pudiera pensarse? Le vendría a la cabeza algún tipo de
divinidad. Podemos pensar en un Dios súper-poderoso, inmortal, todo sabiduría y
bondad… de modo que no haya otro ser mejor que él. Dios, de primeras, sería como
mínimo, la
idea más grande que pudiera pensarse. Esto parece innegable.
Si Dios
no existiera fuera de mi mente, es decir, no tuviera existencia real, cabría
pensar en otro ser aún superior que, por lo menos, existiera, por lo que Dios
no sería la idea más grande que cabe pensar. Pero como hemos partido de la idea
de que Dios sí que es la idea más grande jamás pensada, necesariamente ha de
existir, porque si no, de nuevo, cabría pensar en otro ser idéntico con la
salvedad de existir. Luego,
Dios existe.
San
Anselmo va a hacer la clásica diferenciación entre esencia y
existencia.
Una cosa
son las características de un ser (su esencia) y otra diferente es si ese ser
existe o no.
Una cosa es creer
en la existencia de Dios y otra muy distinta y mucho más compleja CREER A DIOS.
Con el pensamiento
filosófico podemos llegar a creer en la existencia de Dios pero posiblemente no
a conocerlo como es Dios, para lo cual necesitamos algo mucho más extenso y
contundente.
Dios va a
ser el único ser en el que esencia y existencia coinciden. Dios es la
existencia misma, un ser que tiene necesariamente que existir, siendo los demás
seres solamente contingentes (innecesarios: podrían haber existido o no).
En el
episodio bíblico en el que Moisés se encuentra con Dios convertido en una zarza
ardiente, le pregunta quién es y Dios le responde: “Yo soy el que
soy” (Éxodo 3:14). Ninguna definición mejor de Dios para San
Anselmo.
La
crítica vino rápidamente a través del monje Gaunilón de Marmoutier, quien estableció que lo
mismo que podíamos hacer con Dios, podría ocurrir con cualquier objeto
imaginable. Gaunilón pone el ejemplo de las Islas Afortunadas, unas islas maravillosas
perdidas en el mar. Si no existieran, aún podríamos pensar en otras islas aún
mejores que realmente existieran. Por lo tanto, las Islas Afortunadas deben
de existir.
San
Anselmo responde que el mecanismo de su argumento solo es aplicable a Dios en
tanto que lo único máximamente
pensable. Unas
islas paradisiacas, por muy maravillosas que fueren, no son lo máximamente
pensable (cabría siempre pensar en otras islas aún mejores). Dios es, al menos
a nivel de nuestro pensamiento, algo más grande que cualquier otra cosa.
El filósofo norteamericano de la Universidad de Notre Dame, Alvin Plantinga ha definido mucho mejor el argumento ontológico. Él
nos asegura que en todos los mundos posibles 2+2=4 (no
hay mundo posible donde esta realidad no se cumpla)…. por tanto si el
pensamiento que suma el número mayor de poderes y virtudes es posible en un
solo mundo lo será en todos los mundos posibles….DIOS EXISTE.
Alvin Plantinga ha sido galardonado con el premio Templeton valorado en 1,3
millones de euros (unos 1,1 millones de libras esterlinas o 1,4 millones de
dólares), es uno de los premios anuales más grandes del mundo concedidos a un
individuo, siendo más cuantioso que el Premio Nobel.
El mundo de la ciencia y la
educación reconoce en este premio la validez filosófica de la existencia de
Dios.
Una cosa es creer
en la existencia de Dios y otra muy distinta y mucho más compleja CREER A DIOS.
Porque….
¿Cómo es
Dios MORALMENTE?
¿Qué ha
hecho por nosotros además de crearnos?
¿Cuál es
su plan para con el hombre?
¿Ha
dejado algún testimonio dentro de cada ser humano de quiénes somos?
Dios existe o no existe. No existe término medio.
El ateo declara atrevidamente que Dios no
existe; mientras que el teísta declara valientemente que Él sí
Existe; el agnóstico dice que no hay suficiente
evidencia para hacer una decisión en este asunto; y el escéptico duda que
la existencia de Dios pueda ser probada
con certeza.
¿Quién está en lo correcto?
¿Existe Dios, o no?
Desde luego, la única manera de responder a esta
pregunta es buscar y examinar la evidencia. De seguro es razonable
sugerir que si existe un Dios, Él haría
accesible para nosotros la evidencia adecuada para la tarea de probar su existencia. Pero ¿existe tal evidencia?
Todas las autoridades legales
reconocen la validez de
lo que es conocido como un caso prima facie, “a primera vista”. Tal caso
existe cuando está disponible la evidencia suficiente para establecer una gran
probabilidad de la veracidad de un hecho. A menos que ese hecho particular pueda de
alguna manera ser refutado, es considerado probado sin lugar a dudas. Es el
litigio del teísta que existe una vasta cantidad de evidencia extremadamente
poderosa que forma un invulnerable caso prima facie
para
la existencia de Dios.
—Un hecho que simplemente no puede
ser refutado. Nos gustaría presentar aquí una porción de la evidencia que
compone el caso prima facie para la
existencia de Dios.
A través de la historia humana, uno de los
argumentos más efectivos para la existencia de Dios ha sido el argumento
cosmológico (causa y efecto), que apunta al hecho de que el Universo (Cosmos)
está aquí y por lo tanto debe ser explicado.
El Universo existe y es real. Toda persona
racional—incluyendo a ateos y agnósticos—debe admitir este punto.
Así que, surge la pregunta….
“¿Cómo llegó aquí el Universo?” Si una cosa no
puede crearse a sí misma, entonces, se dice que es “contingente” porque
depende en algo externo para explicar su
existencia. Por consiguiente, el Universo es una entidad contingente porque éste no puede
causar o explicar su propia existencia. Si el Universo no se creó a sí
mismo, debe haber tenido una causa.
Es aquí donde la ley de la Causa y el Efecto está
vinculada firmemente al argumento cosmológico. Hasta ahora, según el avance
del conocimiento científico, las leyes
naturales no tienen excepciones.
Desde luego esto es verdad en cuanto a la ley de
la Causa y el Efecto, la cual es la ley más universal y cierta de todas las
leyes.
En palabras simples, la ley de la Causa y el
Efecto declara que todo efecto material debe
tener una causa antecedente que sea adecuada (es decir, una
causa que llega antes del efecto).
Los efectos materiales sin causas adecuadas no
existen. Además, las causas nunca ocurren después del efecto. No tiene sentido
hablar de una causa posterior a un efecto, o de un efecto que llega antes de su
causa. Además, el efecto nunca es mayor que su
causa. Esa es la razón por la cual los
científicos dicen que todo efecto material debe tener una causa adecuada.
El río no se tornó lodoso porque la rana saltó
dentro; ni el libro cayó de la mesa porque la mosca se paró sobre él. Estas no son causas adecuadas. Para cualquier
efecto que vemos, debemos sugerir causas
adecuadas—lo cual nos trae de nuevo a la
Pregunta anterior:
¿Qué causó el Universo?
Solamente existen tres respuestas posibles para
esta pregunta:
(1)El Universo es eterno; siempre ha existido y
siempre existirá;
(2) El Universo no es eterno; mejor
dicho, se creó a sí mismo de la nada;
(3) El Universo no es eterno, y no se creó a sí
mismo de la nada, sino que fue creado por algo (o Alguien) externo, y
superior a éste. Estas tres opciones
merecen una consideración seria.
La idea de que el Universo siempre
ha estado aquí, y siempre estará aquí, ya que esta idea no solamente evita el
problema de un comienzo o un final, sino también la necesidad de cualquier
“primera causa” (tal como Dios).
Sin embargo, la ciencia moderna
reconoce que el Universo no es eterno; éste tuvo un comienzo y tendrá un final.
Entre las leyes más importantes y bien-establecidas
de la ciencia están las leyes de la termodinámica.
La Primera Ley de la
Termodinámica
(A menudo llamada la Ley de la
Conservación de la Energía y/o Materia) declara que ni la materia ni la energía
pueden ser creadas o destruidas.
La Segunda Ley de la
Termodinámica
(A menudo llamada la Ley de la Entropía
Creciente) declara que todo se está agotando o desgastando. El uso de la
energía está llegando a ser cada vez menos
Disponible.
La Entropía (una medida de
casualidad, desorden o
Desproporción) está creciendo.
Desde luego, eso significa que finalmente
el Universo se “destruirá”.
La Segunda Ley apunta a:
(1) un comienzo cuando, por primera
vez, el Universo estuvo en un estado en el cual toda energía estaba disponible
para su uso;
(2) un final en el futuro cuando la
energía nunca más estará disponible (referida por los científicos como una
“muerte térmica”), causando de este modo,
la “muerte” del Universo. En otras
palabras, el Universo es como un gigantesco reloj al que se le ha dado cuerda,
pero que ahora está quedándose
Sin cuerda. La conclusión que se
obtiene de la información científica es ineludible
—el Universo no es
eterno.
Las entidades eternas no tienen un
principio o un final, y no se “desgastan”.
Un científico famoso, Robert Jastrow de la NASA (quien no cree en Dios),
escribió:
“La ciencia moderna niega
una existencia eterna del Universo”.
Él está en lo correcto. Ahora
nosotros sabemos, científicamente, que el Universo no es eterno.
En el pasado, hubiera sido
prácticamente imposible encontrar A través de la historia humana, uno de los
argumentos más efectivos para la existencia de Dios ha sido el argumento
cosmológico (causa y efecto), que apunta al hecho de que el Universo
(Cosmos) está aquí y por lo tanto debe
ser explicado.
El Universo existe y es real. Toda persona
racional—incluyendo ateos y agnósticos—debe admitir este punto. Así que,
surge la pregunta, “¿Cómo llegó aquí el
Universo?” Si una cosa no puede crearse a sí
mísma, entonces, se dice que es “contingente”
porque depende en algo externo para explicar su existencia. Por
consiguiente, el Universo es una entidad contingente porque éste no puede
causar o explicar su propia existencia. Si el Universo no se creó a sí
mismo, debe haber tenido una causa.
Es aquí donde la ley de la Causa y el Efecto está
vinculada firmemente al argumento cosmológico. Hasta ahora, según el avance
del conocimiento científico, las leyes
naturales no tienen excepciones.
Desde luego esto es verdad en cuanto a la ley de
la Causa y el Efecto, la cual es la ley más universal y cierta de todas las
leyes. En palabras simples, la ley de la
Causa y el Efecto declara que todo efecto material debe tener una causa antecedente que sea adecuada (es
decir, una causa que llega antes del
efecto).
Los efectos materiales sin causas adecuadas no existen.
Además, las causas nunca ocurren después del efecto. No tiene
sentido hablar
De una causa posterior a un efecto, o de un efecto
que llega antes de su causa. Además, el efecto nunca es mayor que su causa.
Esa es la razón por la cual los
científicos dicen que todo efecto material debe tener una causa adecuada. El río no se tornó lodoso porque
la rana saltó dentro; ni el libro cayó de
la mesa porque la mosca se paró sobre él.
Estas no son causas adecuadas. Para cualquier efecto que vemos,debemos sugerir causas adecuadas.
—Lo cual nos trae de nuevo a la pregunta anterior: ¿Qué causó el Universo?
—Lo cual nos trae de nuevo a la pregunta anterior: ¿Qué causó el Universo?
Solamente existen tres respuestas posibles para
esta pregunta:
(1)El Universo es eterno; siempre ha existido y
siempre existirá;
(2) El Universo no es eterno; mejor
dicho, se creó a sí mismo de la nada;
(3) El Universo no es eterno, y no se creó a sí
mismo de la nada, sino que fue creado por algo (o Alguien) externo, y
superior a éste. Estas tres opciones
merecen una consideración seria.
Entonces, científicamente, la elección está entre
la materia solamente y algo más que la materia como la explicación para la
existencia y el orden del Universo. Por
tanto, la diferencia entre los dos patrones es la diferencia entre:
(a) El tiempo, la casualidad, y las propiedades
naturales de la materia; o
(b) El diseño, la creación y las propiedades
Innegables de la organización y mente. De hecho,
cuando se llega a cualquier caso particular, solamente hay dos
explicaciones para el origen del orden y
la vida en el Universo: O el orden fue impuesto sobre la materia, o éste reside naturalmente en la materia.
Para aquellos que están dispuestos a sugerir que
el orden reside naturalmente en la materia, nosotros respondemos simplemente
diciendo que de ninguna manera hemos
visto tal evidencia. Además, la evidencia científica
y filosófica que poseemos habla fuerte y claramente de la existencia de una Mente independiente, eterna y
auto-existente que creó este Universo y
todo lo que hay en él.
Aunque traten, los escépticos no pueden evadir
las implicaciones obvias de la Ley de la Causa y el Efecto. No obstante,
eso no ha detenido sus intentos, y por
consiguiente han levantado innumerables argumentos en contra de esto. Por ejemplo, un argumento insiste
en que la idea debe ser falsa ya que es
inconsistente con la misma. El argumento dice
algo como esto. El principio de la causa y el efecto dice que todo debe tener una causa. Entonces, en este
concepto, todas las cosas se remontan a
una Primera Causa, donde repentinamente paran.
Pero ¿cómo puede ser así y permanecer
consistente? ¿Por qué el principio de que “todo necesita una causa” de pronto
cesa de ser verdadero?
¿Por qué es que ésta así-llamada Primera Causa no
necesita igualmente alguna clase de causa? Si todo lo demás
necesita una explicación, o una causa,
¿por qué esta Primera Causa no necesita también una explicación, o una causa? Si esta Primera Causa no necesita una explicación, entonces, ¿por qué todas las otras
cosas necesitan una?
Nosotros podemos ofrecer dos respuestas para tal
reclamación en contra del principio de la causalidad. Primero, es
absoluta y lógicamente imposible defender
cualquier concepto de “regresión infinita”
Que sugiere un sin fin de series de efectos sin
ninguna primera causa final. Los filósofos han discutido justamente este punto
por generaciones.
Todo lo que comienza a existir debe tener una
causa. Nada pasa sin una causa.
Segundo, la reclamación ofrecida por los
incrédulos que proponen que la Ley de la Causalidad es inconsistente consigo
misma no es una Objeción válida en contra
de la Ley; mejor dicho, es una objeción en contra
de un enunciado incorrecto de la Ley. Si alguien fuera a decir, “todo debe tener una causa”, entonces la objeción
puede ser válida.
Pero esto no es lo que la Ley de la Causalidad
dice. Esta declara que todo efecto material debe tener una causa adecuada
que le anteceda. Finalmente, en un punto
del pasado distante, debe haber una
Primera Causa pura que es inmaterial en naturaleza.
La Ley de la Causa y el Efecto, y el argumento
cosmológico basado sobre esa ley, tienen implicaciones en cada área de la
vida humana. El Universo está aquí, y por lo tanto debe tener una
causa adecuada que le anteceda.
Para ilustrar la Ley de la Causa y el Efecto, un
científico, R.L.Wysong, se refirió al siguiente evento histórico. Algunos años
atrás, los científicos fueron llamados a
Gran Bretaña para estudiar los rasgos metódicos de rocas concéntricas y hoyos—un hallazgo arqueológico finalmente
designado como “Stonehenge”.
Mientras los estudios progresaban, llegó a ser bastante aparente que esos rasgos habían sido diseñados específicamente para el propósito de permitir una variedad de predicciones astronómicas. Muchas preguntas (por ejemplo, cómo la gente antigua pudo construir un observatorio astronómico, cómo la información resultante de sus estudios fue usada, etc.) permanecen sin contestar.
Pero una cosa sabemos con seguridad—la causa de Stonehenge fue un diseño inteligente.
Mientras los estudios progresaban, llegó a ser bastante aparente que esos rasgos habían sido diseñados específicamente para el propósito de permitir una variedad de predicciones astronómicas. Muchas preguntas (por ejemplo, cómo la gente antigua pudo construir un observatorio astronómico, cómo la información resultante de sus estudios fue usada, etc.) permanecen sin contestar.
Pero una cosa sabemos con seguridad—la causa de Stonehenge fue un diseño inteligente.
Ahora, compare Stonehenge con la situación
paralela del origen del Universo y de la vida en el mismo. Nosotros
estudiamos la vida, observamos sus
funciones, contemplamos su complejidad (lo cual la gente más inteligente no puede duplicar, aun
usando la tecnología más avanzada y los métodos científicos), y ¿qué
conclusión podemos sacar de esto?
Stonehenge podría haber sido causado por la erosión de una montaña, o por fuerzas naturales catastróficas
trabajando conjuntamente con meteoritos
para producir formaciones de rocas y hoyos concéntricos.
Pero ¿qué científico o filósofo alguna vez sugirieratal idea?
Nadie en sus cinco sentidos pudiera ser
convencido de que Stonehenge “solo pasó” por accidente, aún así, los ateos,
agnósticos, y escépticos esperan que
nosotros creamos que éste Universo muy bien ordenado y diseñado (y la complejidad de la vida
que contiene) “solo pasó”. Aceptar tal idea es irracional porque la
conclusión es irrazonable,injustificada, y no sostenida por los hechos
accesibles. Simplemente la causa no es adecuada para producir el efecto.
Este tipo de razonamiento se aplica no solamente
al Universo, sino también a nosotros que habitamos en él. Nosotros
poseemos ciertos rasgos innegables—la
habilidad de razonar, la habilidad de saber, la habilidad de actuar racionalmente. Pero ¿cuál es el origen de tales
rasgos fundamentales? La teoría de la evolución
de ninguna manera tiene una respuesta
adecuada. Como el filósofo Norman Geisler declaró:
“La causa no puede dar lo que no tiene para dar.
Si mi mente o habilidad para saber es recibida, entonces debe haber
una Mente o Conocimiento que me lo dio.
Lo intelectual no sale de no-intelectual; algo
no puede salir de nada”.
El Dr. Geisler estuvo absolutamente en lo correcto. Si nosotros, como seres humanos, poseemos la capacidad para razonar, entonces debe haber una causa adecuada justo atrás de esa capacidad—una causa que posee la habilidad de razonar. Si nosotros, como seres humanos, poseemos la capacidad de saber (i.e. que hay un lado intelectual como también físico para nuestra composición), entonces debe
El Dr. Geisler estuvo absolutamente en lo correcto. Si nosotros, como seres humanos, poseemos la capacidad para razonar, entonces debe haber una causa adecuada justo atrás de esa capacidad—una causa que posee la habilidad de razonar. Si nosotros, como seres humanos, poseemos la capacidad de saber (i.e. que hay un lado intelectual como también físico para nuestra composición), entonces debe
haber una causa adecuada justo atrás de esa
capacidad—una causa intelectual que posee la habilidad de saber. Si
nosotros, como seres
humanos, poseemos la capacidad de actuar
racionalmente, entonces debe haber una causa adecuada justo atrás de esa
capacidad—una causa que es capaz de actuar, y actuar
racionalmente.
En palabras sencillas, el mensaje central del
argumento cosmológico, y de la Causa y el Efecto sobre el cual es basado,
es éste: Cada efecto material debe tener una causa adecuada que llega antes que
éste.
El Universo está aquí; la vida inteligente está
aquí; la moralidad está aquí; la ética está aquí; el amor está aquí. ¿Cuál es
la causa adecuada que les antecede? Ya
que el efecto nunca puede llegar antes, o ser mayor que la causa, entonces es concluyente razonar que la
Causa de la vida debe ser una
Inteligencia viviente que es en sí misma moral, ética
y afectuosa. Cuando la Biblia anota, “En el
principio creó Dios”.... Genesis 1:1, esto nos hace pensar exactamente acerca de tal Primera
Causa.
Tengo por tanto razones para creer muy poderosas:
1-La conciencia humana (y el origen de la etica y la moral).
2-La diferencia entre el instinto animal y la conciencia humana.
3-Que la materia no puede crear conceptos eticos y morales
4-El argumento cosmológico (causa y efecto) IMPOSIBLE DE REFUTAR es un caso prima facie (te convence a primera vista).Todo efecto material debe tener una causa antecedente que sea adecuada (es decir, una causa que llega antes del efecto).
5-EL PENSAMIENTO MORAL, ESPIRITUAL Y TRASCENDENTE SOLO PUEDE VENIR DE UNA FUENTE DE PENSAMIENTO MORAL, ESPIRITUAL Y TRASCENDENTE MAYOR QUE LA CAUSE.
6-EL DISEÑO INTELIGENTE (ANTE LA COMPLEJIDAD DEL UNIVERSO).
7-El Universo es una entidad contingente porque éste no puede causar o explicar su propia existencia.
8-EL ARGUMENTO ONTOLOGICO. ¿cuál sería la idea más grandiosa, más perfecta que pudiera pensarse? Sin duda la idea de Dios,Dios es, al menos a nivel de nuestro pensamiento, algo más grande que cualquier otra cosa.LUEGO EL Y SOLO EL, puede ser la PRIMERA FUENTE Y CAUSA DEL PENSAMIENTO Y LA ETICA MORAL Y ESPIRITUAL ASI COMO DEL UNIVERSO MATERIAL.
9.EL PRINCIPIO DEL TIEMPO Y DEL UNIVERSO (REQUIERE UNA CAUSA Y VOLUNTAD QUE DECIDA CREARLO).
10-LA NADA NO PUEDE EXPLICAR EL TODO. “La causa no puede dar lo que no tiene para dar. Si mi mente o habilidad para saber es recibida, entonces debe haber una Mente o Conocimiento que me lo dio. Lo intelectual no sale de no-intelectual; algo no puede salir de nada”.
Tengo por tanto razones para creer muy poderosas:
1-La conciencia humana (y el origen de la etica y la moral).
2-La diferencia entre el instinto animal y la conciencia humana.
3-Que la materia no puede crear conceptos eticos y morales
4-El argumento cosmológico (causa y efecto) IMPOSIBLE DE REFUTAR es un caso prima facie (te convence a primera vista).Todo efecto material debe tener una causa antecedente que sea adecuada (es decir, una causa que llega antes del efecto).
5-EL PENSAMIENTO MORAL, ESPIRITUAL Y TRASCENDENTE SOLO PUEDE VENIR DE UNA FUENTE DE PENSAMIENTO MORAL, ESPIRITUAL Y TRASCENDENTE MAYOR QUE LA CAUSE.
6-EL DISEÑO INTELIGENTE (ANTE LA COMPLEJIDAD DEL UNIVERSO).
7-El Universo es una entidad contingente porque éste no puede causar o explicar su propia existencia.
8-EL ARGUMENTO ONTOLOGICO. ¿cuál sería la idea más grandiosa, más perfecta que pudiera pensarse? Sin duda la idea de Dios,Dios es, al menos a nivel de nuestro pensamiento, algo más grande que cualquier otra cosa.LUEGO EL Y SOLO EL, puede ser la PRIMERA FUENTE Y CAUSA DEL PENSAMIENTO Y LA ETICA MORAL Y ESPIRITUAL ASI COMO DEL UNIVERSO MATERIAL.
9.EL PRINCIPIO DEL TIEMPO Y DEL UNIVERSO (REQUIERE UNA CAUSA Y VOLUNTAD QUE DECIDA CREARLO).
10-LA NADA NO PUEDE EXPLICAR EL TODO. “La causa no puede dar lo que no tiene para dar. Si mi mente o habilidad para saber es recibida, entonces debe haber una Mente o Conocimiento que me lo dio. Lo intelectual no sale de no-intelectual; algo no puede salir de nada”.
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